Hace ya muchos años que vi esta película, me gustó bastante, además basada en un hecho real lo que para mí le aporta un plus.
Al finalizar la película me quedé con una sensación extraña. Por una parte, contento por haber disfrutado de ella, pero por otra bastante fastidiado por el desenlace.
En estos días de vendimia del Albillo Real y Moscatel de grano menudo me he acordado de ella en unas cuantas ocasiones.
Para los que no la han visto, aquí os dejo link del tráiler LA TORMENTA PERFECTA  para que os hagáis una idea, pero se podría resumir así: si algo va mal, aún puede ir a peor.

Pues bien, este año hemos tenido la Tormenta perfecta (del Albillo Real y el Moscatel de grano menudo) en nuestra zona.
Un invierno de temperaturas altas hizo adelantarse la brotación pero las cosas comenzaron a complicarse realmente con una helada tardía a finales de marzo que pilló en plena brotación al Albillo Real y al moscatel. Esta helada dejó fuera de combate a la primera brotación, las plantas volvieron a brotar pero la segunda brotación es bastante menos productiva.
Y como ha sido la tónica de este año, inmediatamente después de las heladas subieron mucho las temperaturas, resultado: maduración temprana. Problema: los higos no están maduros.
Os preguntaréis esto que tiene que ver. Pues mucho; los pájaros han centrado sus ataques en la uva y han diezmado una cosecha ya de por si escasa.
Pues esta ha sido la Tormenta perfecta. Por mi parte no recuerdo una cosecha tan corta como la de este año. Solo espero que la sensación que me quede de esta “película” sea totalmente contraria a la que me dejó la verdadera película.
Que lo haya pasado fatal durante el cultivo de la uva pero que el resultado sea fabuloso.
En ello estamos.